El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) sorprendió al mercado tras informar una cifra menor a lo esperado en el IPC del segundo mes del año, sobretodo, luego de reportar una alza inflacionaria del 1,2% el mes pasado.

La economía chilena presentó una variación del 0,3% en el IPC de febrero, cifra sumamente inferior a las pronósticos de los economistas.

En detalle, expertos consultados en la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) del Banco Central esperaban una inflación del 0,6%. Sin embargo, la herramienta de medición económica marcó solo la mitad de lo pronosticado. De esta manera, la inflación anual se posicionó en el 7,8%.

Según se informó, al menos 10 de las 12 secciones que componen las canastas del IPC tuvieron cambios positivos en la medición de febrero.

Las divisiones que sufrieron incrementos son los alimentos y bebidas sin alcohol (1,8%), con 0,458 puntos porcentuales. Asimismo, la vivienda y servicio básicos (0,9%) también se vieron afectados con 0,129 puntos porcentuales.

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En este sentido, productos como el pan aumentaron su precio en un 3,2% en febrero, lo cual representa una escalada del 13% en un año. Por su parte, la carne de vacuno registró un alza del 2,8% con una escalada del 23,3% en doce meses.

Igualmente, el precio de los vehículos nuevos aumento en un 1,7%, manteniendo así un alza anual del 20,6%. Además, la gasolina también vio incrementado su costo en un 1,9% con una escalada anual del 31,3%.

En tanto, una seccion con una notable baja en su valor es la recreación y la cultura (-5,2%) con -0,365 puntos porcentuales.

El presidente de la Camara de la Produccion y del Comercio Biobío, Álvaro Ananías, llamó a no anticiparse en relación con el resto del 2022.

“Si bien este mes el IPC nos sorprendió con un alza menor a lo que se esperaba, lo cual es una buena noticia, no podemos anticiparnos aún a proyectar el año 2022 completo. Sin embargo, esperamos que la inflación tienda a estabilizarse con valores inferiores a los que tuvimos el año pasado”, sostuvo.

Añadió que “observamos este aumento de un 0,3% como un momentáneo alivio al bolsillo y al bienestar de las familias de la región, que durante el año pasado se vieron afectadas por una inflación que superó las expectativas y que nos mantiene en alerta permanente»