El principal gremio de contratistas forestales criticó fuertemente la segunda gestión de Sebastián Piñera por las negativas cifras de atentados en la zona de Arauco, al tiempo que se mostraron expectantes por el rumbo del nuevo gobierno.

Este martes, la Asociación de Contratistas Forestales AG de Chile dio a conocer un comunicado con el balance de los ataques enmarcados en la violencia rural de la provincia de Arauco y región de La Araucanía correspondiente al periodo 2018-2022.

El gremio informó que entre los años 2014 y 2022 se produjeron 340 ataques incendiarios en total. De ellos, el 73% se llevó a cabo en el segundo gobierno de Sebastián Piñera, equivalente a 248.

«Durante este período tenemos el mes con la mayor cantidad de atentados: septiembre del 2021, con 11 ataques. Y lo que es más grave, nuestro gremio debe lamentar el asesinato de tres trabajadores forestales durante este año 2022«, lamentó el gerente del gremio René Muñoz.

Señalan que, entre las consecuencias, se produjo una importante afectación al trabajo y a la inversión de 244 contratistas forestales. Aseguran que «24 mil trabajadores forestales, más sus familias, han recibido el impacto de la violencia irracional de parte de grupos de delincuentes y asociaciones ilícitas, que transitan libremente por ese territorio«.

Consecuencias para el trabajo

«Hay miedo al salir a trabajar en el bosque lo que, por supuesto, es más que entendible, por eso muchas empresas ya no participan de faenas forestales, ni se transita por ciertos caminos de algunas zonas capturadas y aisladas por grupos de delincuentes en las regiones del sur», explicó Muñoz.

Según las cifras entregadas por la Asociación de Contratistas Forestales, en el gobierno de Piñera se han destruido 1.158 equipos forestales de trabajo y camiones forestales.

Además, las áreas en conflicto se han ampliado a 49 comunas de las regiones del Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos, 35 comunas más de las que eran afectadas hasta 2018.

En esa línea, Muñoz señala que «las cifras son indesmentibles» y manifiesta que «el sr. Piñera dejó un país con estas regiones donde no hay Estado de derecho, las instituciones no funcionan y muchas personas deben seguir soportando la acción violenta de grupos terroristas que no tienen ningún contrapeso ni control del Estado».

«Empieza un nuevo ciclo político, nuevamente con buenas intenciones, un gobierno que esperamos detenga la violencia y se interese más en las víctimas«, concluyó René Muñoz.

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