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Prohíben la extracción, venta y consumo de moluscos de la bahía de Coronel por presencia de peligrosa toxina

Moluscos tales cholgas, choritos, machas, almejas, navajuelas y especies como piures, picorocos, locos, lapas y caracoles se verán restringidos. La medida se mantendrá temporalmente, hasta que disminuya la presencia de la toxina.

Este viernes, la autoridad sanitaria del Biobío dictó la resolución que prohíbe de forma temporal la extracción, transporte, elaboración, comercialización y consumo de una serie de especies de moluscos y otros organismos provenientes del borde costero de la bahía de Coronel.

Específicamente, todo molusco extraído entre el límite norte de Punta Puchoco y el límite sur de Punta Lota no podrá ser puesto a la venta para su consumo hasta un eventual decreto de la Seremi de Salud.

La prohibición fue posible tras los resultados sobre la norma de toxina veneno amnésico de moluscos por parte del Instituto de Salud Pública.

Entre los productos restringidos se encuentran moluscos como cholgas, choritos, machas, almejas, navajuelas, además de otras especies como piures, picorocos, locos, lapas y caracoles.

Por otro lado, dicha toxina no afecta a productos tales como pescados, jaibas, langostinos, pulpos, jibias y erizos.

Sobre la toxina

De acuerdo con la Seremi de Salud, este fenómeno surge a partir del impacto del cambio climático en los mares, que modifica la temperatura del agua, favoreciendo la presentación de fenómenos algales nocivos, cuyas toxinas se acumulan en moluscos bivalvos.

«Los mariscos afectados por marea roja, pese a no sufrir cambios en su aspecto, olor o sabor, no deben ser consumidos, ya que las toxinas no se inactivan con la cocción, ni con el vino ni con el limón«, aclaró el seremi Eduardo Barra.

«La medida se mantendrá hasta contar con dos muestras consecutivas bajo valores considerados nocivos para el consumo humano y que se demuestre tendencia a la disminución«, explicó.

Asimismo, afirmó que «la comunidad puede seguir consumiendo sin riesgo pescados, crustáceos y otros mariscos, así como también moluscos provenientes de otras zonas de extracción».

Cabe señalar que desde el año 2005 el Ministerio de Salud ejecuta en la región el Programa Nacional de Vigilancia de Marea Roja, que toma permanentemente muestras de mariscos para determinar la presencia de toxinas marinas.

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