El local incumplía el horario de funcionamiento, por la que fue fiscalizado el pasado 12 de marzo, lo que resultó con la muerte del cabo Álex Salazar. Su cierre se justifica por haberse cometido hechos delictuales.

La Delegación Presidencial del Biobío informó acerca del destino de la controvertida botillería ubicada en la Avenida Prat, la que fue centro de una fiscalización por parte de Carabineros, con resultados fatales.

El Gobierno decretó la clausura de expendio de bebidas alcohólicas en conformidad al artículo 50 de la Ley 19.925, el que señala que se podrán clausurar locales donde se hubieran cometido hechos delictuosos graves.

Para esta decisión se consideró los informes emitidos por la Municipalidad de Concepción y Carabineros, en que se precisa la numeración exacta desde donde se produjo la fiscalización, que terminó con la muerte del cabo Álex Salazar.

El decreto fue remitido a Carabineros para que proceda a la clausura de este local.

La delegada Daniela Dresdner indicó que «requeríamos de toda la documentación que sustente este decreto. Desde que llegamos al Gobierno hemos sostenido que la seguridad pública es uno de los ejes en los que trabajaremos, porque debemos devolver la tranquilidad a los distintos territorios«.

«Nos duele profundamente la muerte del cabo Álex Salazar y no permitiremos que su asesinato quede impune. Por esto hemos solicitado este decreto de clausura y, también, hemos presentado una querella que perseguiremos hasta el final del proceso», afirmó Dresdner.

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