El Juzgado de Garantía accedió a la petición de la Fiscalía, argumentando que restan pruebas por analizar, las que evidenciarían la responsabilidad de los detenidos en el crimen del carabinero.

Este lunes se produjo el primer hito en la investigación de la muerte del suboficial mayor de Carabineros Daniel Palma, asesinado el pasado jueves en las calles de Santiago.

Dos de los sospechosos de participar en el crimen del funcionario policial, los venezolanos Luis Lugo Machado y Ovimarlixion Garcés Briceño, fueron detenidos tras haber sido el primero de ellos rastreado gracias a registros fotográficos de un celular perdido en Lota.

Lugo Machado se le acusa haber participado directamente en el ataque con arma de fuego que le quitó la vida a Palma, disparo ejecutado desde un vehículo. Por su parte, sobre Garcés Briceño pesa una orden de expulsión del país, y además es considerado como un sujeto vinculado al hecho.

Tras la detención, realizada en la comuna de Quinta Normal en la región Metropolitana, se realizó la primera audiencia de control de detención, donde comparecieron los fiscales del Ministerio Público y la defensa de los acusados.

En la instancia se comprobó, mediante registros visuales guardados en los celulares de los sujetos, que efectivamente habían estado en el sitio del suceso donde se dio muerte al suboficial de Carabineros, tercer mártir de la institución en menos de un mes.

En la audiencia, el Ministerio Público solicitó la ampliación del control de detención hasta el día jueves 13 de abril, a lo que el Juzgado de Garantía accedió.

Al respecto, el fiscal Felipe Olivari explicó que «tenemos la convicción de que efectivamente hay participación de ellos en el delito, pero hay que determinar qué tipo de participación tienen, ya sea como autor, cómplice, encubridor. Hay diligencias en curso, peritajes que se demoran y por eso solicitamos la ampliación de la detención«.

Lee también: