Un brasileño que se había fugado de una prisión en Estados Unidos donde estaba encerrado por asesinato y que había sido descrito por las autoridades como armado y extremadamente peligroso, ha sido capturado este miércoles tras dos semanas de búsqueda.
La policía del estado de Pensilvania ha adelantado que iba a celebrar este mismo miércoles «una conferencia de prensa anunciando los detalles de la captura de Danelo Cavalcante», quien el 31 de agosto trepó un muro para fugarse de una prisión cercana a Filadelfia, donde cumplía una condena a cadena perpetua por matar a su expareja delante de su hijo.
Su búsqueda se intensificó el martes después del robo de un rifle en una vivienda cerca de Filadelfia, donde algunas escuelas permanecen cerradas por su «peligrosidad», según la policía.
El teniente coronel de la policía del estado de Pensilvania, George Bivens, informó que el brasileño, de 34 años, se introdujo el lunes por la noche en una vivienda de South Coventry, unos 50 km al noroeste de Filadelfia y robó un «rifle 22 que se encontraba en el garaje». Según el agente, el propietario, sorprendido por el ladrón, le disparó en su huida, aparentemente sin herirlo.
El arma robada cuenta «con mira telescópica y una lámpara», dijo el oficial, que está bajo la lupa de una población aterrada ante su incapacidad de atrapar al fugitivo, visto en varios puntos desde su cinematográfica huida de la cárcel del condado de Chester, en Pensilvania (noreste), el 31 de agosto. «Cavalcante está armado y es extremamente peligroso», advirtió la Policía, que pidió a los habitantes tomar precauciones.
Las fuerzas del orden instalaron barricadas en carreteras y controlaban la circulación de autos, además de desplegar vehículos blindados y equipos de intervención rápida (SWAT), como comprobó un fotógrafo de la AFP.
El domingo, la policía anunció que el fugitivo había cambiado de aspecto: se había afeitado la barba y el bigote con los que aparecía en la foto de búsqueda difundida inicialmente.
Las autoridades publicaron cuatro fotos captadas con cámaras de seguridad del supuesto fugitivo bajo el porche de una vivienda.