Este jueves se dio a conocer el resultado de un importante operativo en la provincia de Arauco que terminó en la detención de once personas involucradas, en mayor y menor grado, en delitos de carácter rural y de asociación ilícita.

Entre los detenidos existen miembros de un brazo armado de la Resistencia Mapuche Lafkenche, un grupo terrorista que en el pasado se adjudicó atentados, y dos miembros de Carabineros, uno en retiro y otro en activo, que habrían prestado colaboración.

El fiscal Juan Yáñez aclaró que «la participación de los funcionarios policiales era función cooperadora para la perpetración de simples delitos, y eso se dirá precisamente en la formalización», descartando que hayan sido miembros directos de la RML.

En cuanto a su participación, detalló que «hay una colaboración respecto de ubicación, dirección y movimientos de parte de personal policial de personal de Curanilahue […] con el objetivo de evitar la acción policial«.

En ese contexto, el jefe de la Prefectura Macrozona Sur Juan Carlos Bustos complementó que «los funcionarios policiales realizaban labores de cobertura y entrega de información privilegiada respecto de los procedimientos que se estaban realizando, y donde podrían transitar con mayor libertad en la sustracción de madera».

En simple, dijo que «facilitaban información para que los delincuentes que realizaban los hechos pudieran salir con mayor facilidad».

Del mismo modo, sobre estos hechos se refirió César Bobadilla, jefe de la VIII Zona de Carabineros, aclarando que la institución alertó a la PDI y al Ministerio Público lo que sucedía con uno de los uniformados.

«Fue el Departamento de Asuntos Internos que detectó en 2022 que el funcionario había cometido una serie de irregularidades con carácter de delito», aseveró.