Sin embargo, este no es el único proceso legal al que el médico se enfrenta, ya que también está pendiente otro juicio en Santiago por acusaciones de abuso sexual contra otras dos víctimas.

La víctima, que estaba en fase 4 de cáncer, recibió la visita del médico en su hogar, quien ejercía como oncólogo en el Hospital Clínico de Magallanes. La agresión ocurrió en mayo de 2019, pocos meses después de que el médico fuera formalizado en Santiago por la denuncia de la primera víctima.

La hija de la mujer contó que su madre «dijo que la hizo levantarse de la cama y ella me decía que sintió sus partes muy duras y dijo que escuchó que él se limpiaba con un papel y le subió el pantalón y la volvió a acostar».

«Mi mamá se puso a llorar, me dijo que no le contara a mi papá«, recordó.

El primer juicio comenzó el 25 de septiembre y en los primeros días testificaron familiares y personas cercanas a la paciente, quien lamentablemente falleció a los 49 años. También declaró personal de la Unidad de Cuidados Paliativos, a quienes la víctima habría confiado los hechos.

Consultado ante la posibilidad de que fuese prudente visitar a la paciente en su domicilio, un funcionario que trabaja en cuidados paliativos del Hospital respondió que «no está dentro del protocolo del funcionamiento propio de la unidad».

«Normalmente nuestros pacientes van acompañados y uno intenta que la relación no sea sólo con el paciente sino que sea con la familia porque en general es una enfermedad terminal», agregó.

La defensa de Álvarez

La defensa del oncólogo llamó este lunes ante el tribunal al exsubsecretario de Redes Asistenciales del Ministerio de Salud Luis Castillo.

«En conjunto con la universidad pusimos en marcha el centro del cáncer de la Universidad Católica, por lo tanto desde esa fecha conozco su actuar, sé de la seriedad de su trabajo«, sostuvo Castillo, respaldando al médico.

Su defensa llevó también a su esposa ante el tribunal, quien resaltó la trayectoria de Álvarez y su trabajo en Magallanes, zona a la que llegó en el año 2018.

«Yo sé que Manuel es inocente, yo lo conozco, llevo con él 40 años. Manuel no es capaz de abusar de nadie…él no es un abusador sexual», aseveró la cónyuge en el juicio en que fue declarado culpable.

Por su parte, Jorge Bofill, el abogado defensor, indicó que «este es nuestro caso, la demostración de que era una paciente que lo estaba pasando extraordinariamente mal y sufría dada la enfermedad que tenía. No estaba en condiciones de ponerse de pie, que es la tesis del fiscal con respecto al abuso. En este caso, la acusación es una fantasía«.

La declaración del imputado

El último en cerrar la ronda de declaraciones fue el mismo Manuel Álvarez Zenteno. «Yo conocía a la paciente, había sido paciente mía en el Hospital Regional. Tenía un dolor en la región del cuello que le impedía incluso tomar agua. Tenía que ir (a visitarla) y lo hice«, señaló.

Sin embargo, el médico no hizo alusión a su supuesta inocencia, centrando su declaración en el trabajo realizado en la región de Magallanes y en el déficit que existía en materia de alivio del dolor y cuidados paliativos para pacientes en estado terminal.

Finalmente, el día de hoy, Clínica Las Condes desvinculó al oncólogo de sus funciones.

¿Quién es Manuel Álvarez Zenteno?

El imputado estudió Medicina en la Universidad de Chile y su especialidad la realizó en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Además, estuvo cinco años en el National Cancer Institute de Bethesda, en Maryland, Estados Unidos.

El médico ha sido acusado de abuso sexual reiterado, lo cual habría ocurrido en su propia consulta en la Clínica Las Condes contra sus pacientes que padecían cáncer, las cuales llegaban a donde él producto del prestigio que este mantenía.

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