La Unión Europea ha expresado su total solidaridad con Ucrania en este momento de conflictos. En vista del inminente segundo invierno de guerra, los jefes de Estado y de Gobierno prometieron al país nuevos suministros de armas y municiones.

También prometen la entrega de generadores de energía adicionales y estaciones de calefacción móviles, así como mayores esfuerzos para obligar a Rusia a participar en la reparación de los daños de la guerra.

La Unión Europea proporcionará asistencia financiera, económica, humanitaria, militar y diplomática decisiva a Ucrania y su pueblo durante el tiempo que sea necesario, según la declaración adoptada por los Jefes de Estado y de Gobierno.

Por lo tanto, debería realizarse un trabajo especialmente intensivo en el suministro rápido de misiles y municiones, así como de sistemas antiaéreos para proteger a la población y las infraestructuras críticas.

Los países no lograron ponerse de acuerdo sobre un nuevo paquete de ayuda financiera por valor de 50 mil millones de euros. Eslovaquia y Hungría se opusieron a la propuesta.

El nuevo jefe de gobierno eslovaco, Robert Fico, pidió garantías contra el mal uso de los fondos. Según los diplomáticos, el primer ministro húngaro, Viktor Orban, también justificó su rechazo con una supuesta falta de claridad sobre si la ayuda anterior se había utilizado con prudencia.

Sin embargo, algunos países de la UE creen que es probable que Orban esté realmente interesado en liberar más de 13 mil millones de euros en fondos congelados de la UE para su país.