A inicios de este año falleció una leyenda del fútbol mundial, Franz Beckenbauer, considerado el mejor defensor de la historia y el último grande del siglo XX en el deporte junto a los también fallecidos Pelé, Johan Cruyff, Diego Armando Maradona y Alfredo Di Stefano.

Este viernes le rindieron un sentido homenaje en el estadio del Bayern Múnich, el Allianz Arena, ceremonia liderada por el presidente de esa nación, Frank-Walter Steinmeier, quien ante miles de personas reconoció el legado que dejó el «Kaiser del fútbol«.

El funeral fue al aire libre en un día brillante y frío en Múnich, en la ciudad natal de Beckenbauer, ceremonia que incluyó a muchas de las figuras más influyentes de la política alemana y del mundo del futbol, así como a miles de aficionados del Bayern.

En Múnich, alrededor de 35.000 personas se despidieron al máximo futbolista germano, ganador de la Copa del Mundo de 1974 y de 1990 como director técnico.

A la ceremonia asistieron el presidente Frank-Walter Steinmeier y el canciller Olaf Scholz, al igual que toda la plantilla del club, el entrenador de la selección alemana Julian Nagelsmann, sus predecesores Hansi Flick y Joachim Löw, así como muchos otros dirigentes y deportistas como Boris Becker, proveniente del mundo del tenis.

El presidente de Baviera Herbert Hainer honró al futbolista, expresando que «se le extrañará como persona, como persona. Solo tenías que admirarlo […] El FC Bayern siempre seguirá siendo un imperio – y para siempre»

«Su habilidad nos impresionó, su apariencia amistosa conquistó a la gente, su justicia y su actitud nunca coincidieron con su talento», dijo el presidente federal Steinmeier.

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