Después de más de seis años de espera, el ex alcalde de San Ramón Miguel Ángel Aguilera se presentará ante la justicia el 27 de febrero, enfrentando acusaciones de cohecho, enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
La Fiscalía busca una condena de diez años de prisión en su contra. El caso, que salió a la luz en octubre de 2019, reveló vínculos entre la municipalidad y el narcotráfico, lo que llevó al término de contratos con personas relacionadas con esta actividad.
Aguilera, quien en ese entonces era vicepresidente del Partido Socialista, renunció a la colectividad y se postuló como candidato independiente en 2021.
Aunque inicialmente obtuvo la victoria, la elección fue anulada por denuncias de fraude electoral debido al uso irregular del voto asistido, sufragios sin sellos y la falta de actas oficiales.
Tras pasar un año en la cárcel de Santiago 1, Aguilera se encuentra actualmente en arresto domiciliario total. No obstante, ha logrado suspender la medida en 35 ocasiones por motivos como reuniones familiares, asesorías legales y consultas médicas.
Además, informes policiales indican que habría incumplido el arresto en al menos cuatro oportunidades.
El actual alcalde de San Ramón, Gustavo Toro, considera que los constantes retrasos en el juicio han generado una sensación de impunidad. “Es una burla al sistema judicial”.
“Se ha aprovechado cada oportunidad para alargar el proceso y así acumular días de reclusión domiciliaria que eventualmente podrían descontarse de una condena futura”, sostuvo.
Por su parte, la abogada de Aguilera, Rocío Berríos, negó que exista una estrategia dilatoria y asegura que su equipo ha buscado agilizar el proceso, pero que factores fuera de su control han impedido su avance.
Mientras tanto, el exalcalde insiste en su inocencia y asegura estar listo para enfrentar el juicio, confiando en que “se hará justicia”
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