Autoridades destacaron la buena coordinación entre centros médicos de la red con los municipios, lo que ha permitido salidas a terreno de los profesionales de la salud.

En medio de la emergencia por los incendios forestales, ya son 623 las personas atendidas por los recintos médicos de la red del Servicio de Salud Talcahuano (SST), de ellas cinco son gran quemados, de los cuales cuatro han sido derivados a otros establecimientos.

Durante estos días se han desplegado diversos profesionales en terreno, tanto para atender requerimientos de atención física como emocional.

Al respecto, la subsecretaria (s) de Redes Asistenciales Fabiola Jaramillo, tras una visita a la red, valoró el trabajo y entrega personal de los profesionales que se han desplegado en las zonas afectadas.

Por otro lado, la autoridad nacional aseguró que se está haciendo con la población un «levantamiento de necesidades» y aseguró que «siempre hay espacio para la mejora continua«, enfatizando que la retroalimentación de los equipos es clave para asegurar una primera respuesta efectiva.

Es así como el director (s) del Servicio de Salud Talcahuano (SST) Francisco Cortés declaró que «todas las bases Samu de nuestro territorio han estado no sólo abiertas, sino que además en las contingencias han hecho el traslado de móviles avanzados de atención«.

«Luego en nuestra red hemos coordinado a nuestros tres hospitales (Tomé, Penco Lirquén y Las Higueras). También se han hecho rondas de visitas a pacientes», resaltó Cortés.

El máximo directivo del SST remarcó que hay una «buena coordinación con la Atención Primaria de Salud (APS), con las municipalidades de Tomé y de Penco, donde hay un diagnóstico en conjunto, en que se ha podido optimizar la atención de los establecimientos y las salidas a terreno».

Finalmente, el seremi de Salud del Biobío Eduardo Barra dijo que «hemos estado presentes para estar con la gente, para hacer sentir que ellos no están solos, que nuestro gobierno está apoyando, que el sistema sanitario está absolutamente disponible para ayudarlos y de esa forma hacer que este proceso sea menos doloroso y que la reconstrucción se mucho más rápido tanto en lo físico, en lo material, como también en lo personal y en lo emocional».

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